11/02/2020
La elección de Cuenca para la celebración del encuentro, que ha sido el primero de una serie de debates, no es casual, tal y como han señalado fuentes de Asedas. Dicha elección obedece al elevado grado de despoblamiento de la provincia, a pesar de estar en una de las comunidades autónomas con mayor índice de producción de alimentos.
La cita contó con la asistencia de Francisco Martínez Arroyo, consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, quien puso en valor el papel de los supermercados, destacando, además, la importancia de que los productos incluidos en sus lineales sean producidos en la región. “El 47% de los consumidores elige los supermercados para la compra de los productos y, para el Gobierno regional, es primordial que en los lineales se encuentren aquellos que están producidos en la región; principalmente los amparados por una de las 47 figuras de calidad existentes”. Al respecto, recordó que el Ejecutivo regional continúa trabajando en la creación de una marca paraguas que amparará a los productos elaborados bajo estas figuras de calidad, que se presentará a lo largo de este año. Y para darla a conocer, dijo, es fundamental el apoyo de la distribución.
Por su parte, Ignacio García Magarzo, director general de Asedas, y Rafael Ruiz Alonso, presidente de Asucam, subrayaron que las razones de la alta capilaridad de la red de supermercados reside en la fortaleza de las cadenas regionales que, ayudadas por las centrales de compra, introducen un elemento de equilibrio en la cadena. También incidieron en el impacto de estas en la economía rural, tanto a través de la creación de empleo directo como del apoyo a los productores locales, puesto que los productores encuentran canales de comercialización de proximidad para sus productos que, a su vez, aportan un elemento diferenciador a los supermercados regionales.
En este sentido, María Ángeles Rosado, de Asaja Cuenca, defendió la necesidad de contar con una cadena de valor fuerte y colaborativa como la que se ha construido en España como “un factor ineludible para impulsar la fijación de población en estas zonas”.
En la Jornada participaron también Jesús Alique, comisionado del Reto Demográfico de Castilla-La Mancha, y Sara Bianchi, secretaria general técnica de SSPA –Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa-. Jesús Alique enumeró algunos de los pilares fundamentales para atraer población a las zonas rurales y asegurar la igualdad de derechos: el acceso a la vivienda, el transporte, la banda ancha y la actividad económica. Sara Bianchi, por su parte, puso el ejemplo de Escocia, que ha conseguido asentar población en zonas rurales gracias a unos buenos servicios básicos y a la creación de puestos de trabajo estables.
Tal y como expusieron, el objetivo tanto de Asedas como de Asucam es contribuir a que la necesidad básica de tener acceso a una alimentación completa, variada, segura y a precios competitivos llegue también a todas las personas que optan por vivir en municipios pequeños y apartados. La totalidad de la población española tiene al menos un supermercado a menos de 15 minutos de sus casas, lo que implica que en España no se de el fenómeno de los “desiertos alimentarios”.