02/06/2023
Por cultivos, en trigo blando las cooperativas estiman que se alcanzarán los 5,05 millones de toneladas, en cebada 2,8 Mt, en maíz 2 Mt, en trigo duro 318.305 toneladas, en avena 123.204 toneladas, centeno 32.135 y triticale y otras 108.509 toneladas. El rendimiento medio estimado en esta campaña es de 1,66 t/hectárea y destaca el elevado volumen de hectáreas que no se cosecharán por bajo rendimiento, porque cultivos como la avena, el centeno y los triticales se han utilizado para aprovechamiento ganadero.
Desde Cooperativas Agro-alimentarias de España señalan que esta caída de la producción debida a la sequía pone de manifiesto la necesidad de buscar nuevas técnicas y soluciones que mejoren el rendimiento de los cultivos y hagan frente a los desafíos del cambio climático. En este sentido, apuntan a la investigación, la mejora genética y las nuevas variedades como claves para mejorar los rendimientos, además de unas políticas adecuadas de gestión del agua.
Cereales de invierno
Por su parte, la Sectorial de Cereales de ASAJA, ha analizado los datos una vez comenzada la recolección, adelantada en muchas zonas como consecuencia de la sequía. La organización estima que la cosecha de cereales de invierno de este año sufrirá una reducción del 65%, con 9,4 millones de toneladas menos respecto al año pasado. Las altas temperaturas y la ausencia de lluvias de febrero a mayo han dado al traste con unas expectativas de cosecha que se consideraban normales al inicio de la campaña.
Por cultivos, según los cálculos de ASAJA, se espera una producción de 2,12 millones de toneladas en trigo blando; 216.000 toneladas en trigo duro; 2,41 millones de toneladas en cebada; 123.000 toneladas de avena; 31.000 toneladas de centeno y 103.000 toneladas de triticale. Los recortes en los rendimientos son generalizados en la práctica totalidad de la superficie cerealista nacional.
A las consecuencias de la sequía, ASAJA añade otros problemas, como los altos costes de producción, los daños registrados por la fauna silvestre, el aumento de enfermedades y plagas que no pueden atajarse con productos fitosanitarios por la retirada de materias activas y la prohibición de la quema controlada de rastrojos.