24/11/2021
Son datos del Consejo Internacional de Frutos Secos y Frutas Deshidratadas, que también informa de que a pesar de las interrupciones relacionadas con COVID-19, la demanda general se mantuvo fuerte en la campaña 2020/21, con la mayoría de las exportaciones mostrando incrementos en comparación a la temporada anterior e incluso alcanzando un récord de envíos internacionales. Esta temporada, “las interrupciones en el envío y la logística están creando algunos retrasos y escasez de suministro a corto plazo”.
Según las previsiones del Consejo, la producción mundial de almendras estará por debajo de 2020/21, situandose en los 1,59 millones de toneladas (1,73 millones en la campaña 2020/21). La de nueces también terminará ligeramente por debajo, pasando del millón a las 984.925 toneladas, ya que China espera una cosecha media y California una más corta.
Por el contrario, se prevé que las cosechas de anacardo, avellana y macadamia 2021/22 terminen entre el 3 % y el 7 % por encima de la temporada pasada, mientras que el mayor incremento se observa en piñones, principalmente debido a las cosechas más grandes en China y Rusia.
En cuanto a los cacahuetes, se espera que la producción mundial ascienda a aproximadamente 50,5 millones de toneladas, un 2 % más que en 2020/21, con un incremento en las cosechas de Nicaragua (14 %), Brasil (9 %), Nigeria (8 %), China (4 %), EE. UU. (2 %) e India (1 %).
La producción mundial de fruta deshidratada en 2021/22 se ha pronosticado en torno a los 3,17 M TM, un crecimiento del 6 % en comparación con 2020/21, ya que se espera que la producción aumente significativamente para las ciruelas deshidratadas y dátiles, y levemente para uvas y arándanos deshidratados.