25/11/2019
La industria agroalimentaria no solo es una herramienta clave del engranaje económico y de riqueza de Castilla-La Mancha, sino que, además, es su estandarte a nivel internacional, donde los vinos, quesos, aceites o azafrán de La Mancha, entre otros muchos productos, cuentan con un gran reconocimiento. Por tanto, no es casual que su impulso y promoción sean una de las piedras angulares del actual Ejecutivo regional, plasmada en la creación de la nueva Dirección General de Alimentación, adscrita a la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural.
Porque, no cabe duda, desarrollo rural y alimentación van de la mano, puesto que, tal y como declaró el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, en la presentación de su nuevo equipo de Gobierno el pasado mes de julio, “la alimentación se basa en el esfuerzo de los agricultores y ganaderos”.
Un esfuerzo que es reconocido anualmente en la gala de entrega de los Premios Gran Selección, cuya celebración tuvo lugar el pasado 6 de noviembre en el Teatro Circo de Albacete. Allí, más de 600 personas se reunieron para reconocer a los alimentos de calidad diferenciada de Castilla-La Mancha, así como homenajear el trabajo y buen hacer de todos los agentes que hacen posible que la región sea reconocida por la calidad y la riqueza de sus productos gastronómicos. “Traemos el mejor de los esfuerzos de la gente que vive en el medio rural”, dijo en su intervención el consejero.
El acto fue presidido por el vicepresidente del Gobierno regional, José Luis Martínez Guijarro, que estuvo acompañado, además de por Martínez Arroyo, por Vicente Casañ y Santiago Cabañero, alcalde y vicepresidente de la Diputación de Albacete, respectivamente. Además, contó con representación de las organizaciones agrarias Asaja, UPA y COAG, así como de organizaciones empresariales, industrias agroalimentarias, empresarios particulares, entidades financieras y una muestra del sector social y empresarial de la región.
Mucho más que alimentos
Tal y como reza la definición de figuras de calidad recogida por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, los productos acogidos a ellas son mucho más que un alimento, ya que en su producción están reconocidos un conjunto de características peculiares y específicas ligadas al origen de las materias primas utilizadas y a los procedimientos de elaboración.
En Castilla-La Mancha son 47 las figuras de calidad reconocidas, tras las que se encuentran 160.000 agricultores y ganaderos, generadores del 15% de su riqueza. Los Premios Gran Selección reconocen un total de doce categorías: vino, queso manchego, aceite de oliva virgen extra, miel, azafrán de La Mancha, jamón serrano, berenjena de Almagro, melón de La Mancha, ajo morado de Las Pedroñeras, cordero manchego, pan de Cruz de Ciudad Real, elaborados de carne de caza así como la mejor industria de producción ecológica -un reconocimiento que fue instaurado el año pasado-.
De cara al futuro, el objetivo del Ejecutivo regional es continuar impulsando la diferenciación de los productos de calidad diferenciada castellano-manchegos, de ahí que, tal y como anunció José Luis Martínez Guijarro, el propósito es que a lo largo del próximo año Castilla-La Mancha cuente con una marca paraguas que funcione como un sello diferenciador para amparar a todas las producciones agroalimentarias que están acogidas a algunas de las 47 figuras de calidad. “Vamos a hacer un especial esfuerzo de promoción a nivel nacional e internacional para dar a conocer las bondades de nuestros productos”, dijo durante su intervención en la ceremonia. Aunque para que el éxito de esta acción sea mayor, el vicepresidente pidió la colaboración del sector empresarial. “Necesitamos que ese esfuerzo que habéis hecho durante años lo pongáis a disposición del sector agroalimentario incorporando a vuestras etiquetas esta marca”, indicó.
Por su parte, Martínez Arroyo explicó que el objetivo de todo el sector, administraciones incluidas, “no es otro que conseguir que el nombre de Castilla-La Mancha vaya en nuestros productos”. Y para ello, dijo, “hay que aunar esfuerzos y aportar valor de marca, una tarea en la que debemos implicarnos todos y ante lo que tenemos que redoblar esfuerzos para que el consumidor los identifique”. Asimismo, puso en valor tanto la diversidad del territorio castellano-manchego como el trabajo de agricultores y ganaderos. “La agricultura y la ganadería tienen un papel fundamental, una historia de siglos y son las actividades que más han ayudado a crear la realidad que hoy tenemos”, dijo.
Dentro de esta realidad ocupa también un lugar propio la producción ecológica, tanto por su proyección de futuro como por su peso en el ecosistema agrario y económico de la región, tal y como explicó Francisco Martínez Arroyo. “Castilla-La Mancha es la primera superficie de Europa en cultivo ecológico arable, y tenemos el compromiso de más de 8.000 productores que han apostado por un modelo de producción que también es una figura de calidad y a los que también queremos reconocer”. Un compromiso que desde la pasada edición de los Premios Gran Selección tiene recompensa propia en forma de galardón.
Vinos con premio
Así, en los XXX Premios Gran Selección el reconocimiento a la mejor industria de producción ecológica ha recaído en Bodegas Latúe-San Isidro Sociedad Cooperativa de Castilla-La Mancha, de Villanueva de Alcardete (Toledo), que con una trayectoria de más de medio siglo es una de las bodegas ecológicas más grandes del mundo, comprometida con la calidad y el medio ambiente, con vinos aptos y certificados para vegetarianos y veganos que se exportan a más de 25 países.
En la categoría de vinos, el premio Gran Selección 2019 al vino de calidad diferenciada blanco ha sido para la marca Isla Oro Airén, de la DO La Mancha de Bodegas Isla de Villarta de San Juan (Ciudad Real). El premio Gran Selección 2019 al vino de calidad diferenciada rosado ha sido para Corazón Loco Rosado, de Bodega Iniesta de Fuentealbilla (Albacete), de la DO Manchuela; mientras que el Gran Selección 2019 para el vino tinto de calidad diferenciada de las añadas 2017 y 2018, ha sido para la marca Castillo de Aresán Petit Verdot de Castillo Aresán, de la IGP Vino Tierra de Castilla, de Villarrobledo (Albacete).
Entretanto, el premio Gran Selección 2019 al vino tinto de calidad diferenciada de las añadas anteriores a 2017 ha sido para Finca El Carril Paolo Andrea, de Bodega Iniesta de Fuentealbilla (Albacete) de la DO Manchuela. En espumosos, el galardón ha recaído en Corazón Spumante Rosado, de esta misma bodega.
La calidad diferenciada tiene recompensa
En cuanto a los premios a los mejores quesos de calidad diferenciada en sus diversas categorías, el Gran Selección 2019 al queso de calidad diferenciada semicurado ha sido para la marca Corcuera, de Quesos Corcuera, SL, de La Puebla de Montalbán de Toledo. El premio al mejor queso de calidad diferenciada curado para la marca Maese Miguel Curado, de Industrial Quesera Cuquerella, SL, de Malagón (Ciudad Real); mientras que el mejor queso artesano semicurado, ha sido para Pérez Arquero, de Viñedos y Bodegas Pérez Arquero, de Ocaña (Toledo) de la DO Queso Manchego y el premio artesano curado, para la marca Marantona, de Quesos La Casota de La Solana (Ciudad Real). En aceite de oliva, uno de los productos clave de la dieta mediterránea, el premio Gran Selección 2019 ha sido entregado para Casas de Hualdo, de Casas de Hualdo SL, ubicada en El Carpio de Tajo (Toledo) y amparado bajo la DO Montes de Toledo, una de las cuatro denominaciones de origen existentes en la región. En la categoría de miel de calidad diferenciada, donde Castilla-La Mancha cuenta con una denominación propia, la de Miel de la Alcarria, ha sido para la marca Nectarius Multifloral, de la empresa Alcarria Esencial Nature, situada en Cifuentes (Guadalajara).
El premio Gran Selección 2019 al mejor azafrán de La Mancha ha sido para la marca Zaffralia, amparada bajo la DOP Azafrán de La Mancha, de Hermanos Cabra Carrasco, de la localidad toledana de Madridejos. Además, el premio al mejor jamón serrano ha recaído en la marca Jaseto, gran reserva, de la empresa Jamones El Chato de Torrijos (Toledo).
Continuando con la entrega de estos galardones que representan lo mejor de la región, se ha premiado como la mejor berenjena de Almagro a la realizada por la marca Conservas Antonio, de Conservas Manchegas Antonio, perteneciente a la IGP Berenjena de Almagro, de Bolaños de Calatrava (Ciudad Real). En la categoría de melón de La Mancha se ha entregado un reconocimiento a la marca Tomil, de la cooperativa Santiago Apóstol de Tomelloso (Ciudad Real).
Siguiendo con productos únicos de la región, el premio al mejor ajo morado de la IGP ajo morado de Las Pedroñeras, ha sido entregado a la marca Ajosanto, de la Cooperativa San Isidro El Santo de Las Pedroñeras (Cuenca).
El premio al mejor cordero de calidad diferenciada, otro de los productos emblemáticos de la región, ha sido para Isidoro Ortega Toledo, de la IGP cordero manchego, empresa ubicada en Albacete. El premio al mejor Pan de Cruz Gran Selección 2019 ha sido para Juan Pedro e Hijos, de La Solana (Ciudad Real), perteneciente a la IGP Pan de Cruz de Ciudad Real.
Para finalizar, en la categoría de productos elaborados de carne de caza el galardón se ha entregado esta tarde a la marca Jespep de la empresa Exclucentro, de Motilla del Palancar (Cuenca).