La investigación aplicada a la vuelta de la esquina

AVA-ASAJA no hace caso a los clichés, que claman a que los agricultores suelen llorar. Pertenece a los que han hecho realidad el segundo más productivo de España llenando las alacenas de alimentos sostenibles, rentables y de calidad, fruto de la perseverancia del productor y la I+D+i agrícola, que no siempre llega a tiempo. La organización no se ha quedado de brazos cruzados y ha erigido la Finca Experimental Sinyent, espacio de “investigación de proximidad”, poblado de ensayos y donde se transfiere tecnología directamente al campo de manera rápida y práctica. Centros de investigación y empresas de insumos ponen más que un grano de arena.

Los portones abiertos en par en par de la finca puesta en marcha en 2011 por iniciativa de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) en Polinyà de Xúquer (Valencia). Ante nosotros, la prensa, sus primeros frutos. Ensayos en más de 20 cultivos diferentes, que corresponden a las sectoriales de la organización: cítricos, por supuesto; caqui, el cultivo que ha compensado la falta de rentabilidad de otros leñosos; olivo, almendro, nogal, algarrobo, cereza; paulownia para generar biomasa; otros diversos frutales, uva de mesa y de vinificación, hortícolas, arroz; y bajo malla que frena los vientos cálidos, se ensayan cultivos de arándano, aguacate y kiwi.

Microcosmos experimental

Cristóbal Aguado señala los puntos cardinales de una finca superior a 25 ha, que reúne las condiciones climatológicas, edafológicas y de dimensiones adecuadas para el objetivo de la experimentación, adaptada a la mayoría de cultivos implantados en la Comunidad Valenciana.

“En cada parcela, a razón de una hectárea cada una, se experimenta con diferentes variedades, patrones, abonos, sistemas de riego, mecanización, nuevas prácticas de cultivo y eficacia de los productos fitosanitarios”, destaca el presidente de AVA-ASAJA. El objetivo del proyecto es el impulso de la I+D+i, con especial atención a la transferencia de tecnología. “Se trata de un ejemplo de investigación de proximidad, sin apenas precedentes en la agricultura española, pensado, concebido y diseñado para realizar ensayos y transferir tecnología de manera ágil y eficaz a los asociados de AVA-ASAJA, lo que les permite dotarles de herramientas esenciales para afrontar los retos de futuro”, sostiene Aguado.