24/02/2023
Los destinos seleccionados para esta edición de 2023 han sido Aroz Berri (Navarra), Agrícola Antón (Tordesillas), Tecniagro 2000 (Manzanares) y Suproval (Aldaia).
Este programa está diseñado para mejorar el servicio posventa que Kubota ofrece y comprender de forma minuciosa las necesidades de cada cliente. Todo ello, con el objetivo principal de incrementar la satisfacción hacia el producto y el servicio que ofrece la marca japonesa.
Para ello, un grupo de profesionales especializados, formado por personal e ingenieros de la sede central de Kubota España, prepararon unas jornadas de puertas abiertas con los concesionarios, donde los clientes Kubota llevaron sus tractores para su inspección. Todos los participantes recibieron formación sobre el funcionamiento de los nuevos modelos, información sobre la tecnología empleada en los motores Kubota y formación sobre el correcto mantenimiento de los tractores.
En esta edición de 2023, que comenzó a mediados de febrero y se desarrolló a lo largo de una semana, se realizaron diferentes visitas a concesionarios oficiales previamente seleccionados, con la participación de los departamentos de Soluciones al Cliente, Comercial y Marketing de Kubota, trabajando conjuntamente para atender las necesidades de los clientes e informarles de las novedades que la marca está desarrollando para sus productos.
El programa KIP facilita el intercambio de opiniones con los clientes y la identificación de sus necesidades particulares, para posteriormente afrontar las mejoras necesarias.
Según Javier García, gerente de Ventas de Soluciones al Cliente de Kubota España, “Las jornadas KIP han sido todo un éxito debido a que Kubota ha llegado al agricultor y ha conocido sus inquietudes dando así el valor que se merece a la postventa y reflejando el compromiso de la compañía con el cliente final”.
Para completar esta iniciativa, Kubota lanzó una oferta especial para los clientes hasta el 15 de marzo, el Profi-Check. El programa tiene, además de las operaciones básicas de mantenimiento programado según modelo, una detallada inspección en hasta 60 puntos de control, utilizando equipos de diagnosis específicos para ofrecer a cada cliente la máxima seguridad en el funcionamiento del producto con un mínimo riesgo de paradas imprevistas durante la posterior operación en la explotación.