10/02/2022
Así, España llega a este Día Mundial de las Legumbres 2022 -una efeméride instaurada por la Organización de Naciones Unidas para poner en valor y potenciar el cultivo y el consumo de este superalimento- con un crecimiento sostenido de su consumo desde el año 2016.
Según las últimas cifras suministradas por la Base de datos de Consumo en Hogares del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en los primeros nueve meses del pasado año, el consumo neto de legumbres en España alcanzó los 2,54 kg/per cápita frente a los 2,41 de 2019. La Asociación de Legumbristas de España recuerda que 2020 no puede emplearse como referencia, ya que la situación de pandemia provocó una subida espectacular de las ventas (más del 25%), a causa del acaparamiento derivado de la incertidumbre de la situación.
Así pues, tomando como punto de partida el año 2015, que marcó la cifra más baja de consumo por hogar con tan solo 2,18 kg/pc, nuestro país ha experimentado una recuperación de los niveles de ingesta en el entorno del 3% anual, lo que pone de manifiesto un paulatino y constante regreso a la tradición culinaria. Respecto a las preferencias por productos, el garbanzo continúa siendo el plato favorito de los españoles, con un 42,5% del total, seguido por un empate técnico entre lentejas y alubias con un 29% y 28,5%, respectivamente.
El futuro invita a comer más legumbres
A pesar de este crecimiento constante, el consumo sigue a una gran distancia de las cifras de décadas pasadas y lejos de las indicaciones de los nutricionistas que recomiendan, al menos, la ingesta de legumbres tres veces por semana. Sin remontarnos mucho, a finales del siglo XX el consumo superaba con creces los 4 kilos por persona y año, por lo que el margen de mejora es amplio.
La Asociación de Legumbristas de España incide en que todos los indicadores actuales apuntan a la necesidad de comer más legumbres. Desde el punto de vista de la salud y la nutrición, cada día aparecen nuevos estudios que hablan de los beneficios de las legumbres.
Desde el punto de vista medioambiental, las legumbres son 100% sostenibles, y su cultivo fija nitrógeno en el suelo, necesita muy poca agua y tiene una huella de carbono muy baja. Un ejemplo de estos beneficios al medioambiente –subraya la Asociación- es que la nueva PAC, que es la más “verde” de la historia, potencia el cultivo de las legumbres tanto como rotación de cultivos, como a nivel de su uso para alimentación animal y también para aumentar su producción para consumo humano.
Por último, desde el punto de vista socioeconómico, en un mundo en crisis alimentaria permanente y en una coyuntura de alta inflación, las legumbres son un alimento asequible para todos, base de la alimentación de amplias zonas del planeta y que ayuda a las familias a alimentarse de forma sana y completa.