España y Francia apuestan por una nueva PAC con ambición presupuestaria, además de medioambiental

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, se reunió ayer en la sede del MAPA con su homólogo francés, Didier Guillaume, coincidiendo con la celebración de la jornada sobre la iniciativa 4 por 1000, que tuvo lugar en el marco de la COP25.

Una ocasión que ambos mandatarios han aprovechado para reafirmar el compromiso común de los dos países vecinos con una Política Agrícola Común (PAC) fuerte para el próximo periodo, que garantice el mantenimiento de las explotaciones agrícolas competitivas, la vitalidad y la diversidad de los territorios rurales, así como la seguridad alimentaria en la Unión Europea.

Para ello, han destacado la necesidad de mantener el presupuesto actual de la PAC a UE27, tanto en el primer pilar (ayudas directas) como en el segundo (desarrollo rural). Asimismo, han mostrado su apoyo a la arquitectura medioambiental propuesta por la Comisión Europea que, tal y como afirma el MAPA en un comunicado, va a permitir acompañar la transición de las explotaciones al servicio de la lucha contra el cambio climático y la preservación de los recursos. En este sentido, España y Francia consideran fundamental que la ambición presupuestaria esté en línea con la ambición medioambiental.

Otro de los asuntos sobre los que han conversado los dos ministros ha sido la situación provocada por las sanciones arancelarias impuestas por Estados Unidos sobre diversos productos agroalimentarios de la Unión Europea, a raíz del contencioso Airbus. Ambos países entienden que la Comisión Europea debe movilizar todas las medidas disponibles para evitar perturbaciones en los mercados y compensar las pérdidas de los agentes económicos, en aras de proteger a los sectores agrícolas que se han visto injustamente afectados por este conflicto comercial. Planas y Guillaume han acordado solicitar la inclusión de este punto en el orden del día del próximo Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea del 16 y 17 de diciembre en Bruselas, con el fin de recordar la necesidad de movilizar las medidas compensatorias adicionales.