7-2-2013
Investigadores del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (IFAPA) de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de Andalucía han participado junto a un equipo de la Universidad de Córdoba en la primera secuenciación del genoma del garbanzo, trabajo cuyos resultados permiten disponer por primera vez de una herramienta fundamental para mejorar y obtener nuevas variedades con mayor calidad, tolerancia a la sequía, resistencia a enfermedades o adaptadas a los nuevos gustos del consumidor.
El trabajo, de carácter internacional y publicado en la revista científica de alto impacto ‘Nature Biotecnology', detalla que el genoma del garbanzo contiene 28.269 genes y facilita información sobre su estructura y función. Además se presentan los resultados de 90 líneas cultivadas entre las que se encuentra la variedad de garbanzo ‘Blanco Lechoso', muy consumido en el mercado español.
Los expertos de Ifapa confirman que gracias a los óptimos resultados de este proyecto, se dispondrán de marcadores moleculares que permitirán conocer los genotipos que interesan de cada variedad y reducir el tiempo requerido para la obtención de una variedad a la mitad.
Los autores de este estudio, del que forman parte tres investigadores de Ifapa ‘Alameda del Obispo' de Córdoba (Josefa Rubio, Teresa Millán y Juan Gil), son miembros de un Consorcio Internacional constituido por 49 científicos de 23 organizaciones de diferentes países que llevan trabajando varios años en programas de mejora de este tipo de leguminosa, la segunda más cultivada en el mundo tras la soja.
Línea de investigación y experimentación en leguminosas
El Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera lleva más de 30 años trabajando conjuntamente la Universidad de Córdoba en la experimentación e investigación de las variedades de garbanzo y habas más cultivadas en Andalucía.
Entre los logros obtenidos de este Programa Andaluz de Mejora del Garbanzo, se encuentra la obtención mediante métodos clásicos de más de una decena de variedades con mayor resistencia a las principales enfermedades que acechan a esta leguminosa, así como adaptadas a las condiciones agroclimáticas de Andalucía. Todos estos ensayos se realizan en la finca experimental ubicada en Ifapa Alameda del Obispo.