Semillas Fitó no tratará sus semillas de solanáceas y cucurbitáceas a partir de noviembre

La compañía catalana ha anunciado que a partir del 1 de noviembre dejará de tratar sus semillas de solanáceas y cucurbitáceas atendiendo así “las demandas crecientes de la sociedad en busca de la reducción del uso de pesticidas y preservación del medio ambiente, y en total cumplimiento de la normativa europea vigente”.

Semillas Fitó ha tomado la decisión de adoptar la normativa de la Comisión Europea, que decidió mediante el Reglamento de ejecución EU 2018/1500, del 9 de octubre del 2018, no renovar la autorización de la materia activa tiram, y estableció el 1 de febrero del 2020 como fecha límite para vender y sembrar semilla tratada con esta sustancia activa.

Asimismo, la empresa ha decidido “ir un paso más allá” y eliminar los tratamientos fitosanitarios de todas sus semillas de solanáceas y cucurbitáceas.

Sí seguirán tratando, no obstante, las semillas de leguminosas y maíz dulce, con los fungicidas autorizados “que se muestren eficaces hasta disponer de alternativas que garanticen un menor impacto en el medio ambiente”.

Para abordar este cambio con eficacia, Semillas Fitó ha incrementado sus trabajos de prevención y control hasta la expedición de sus productos, mejorando los sistemas de producción y extracción de semilla e incorporando los últimos métodos de detección en laboratorio para confirmar que la semilla está libre de cualquier hongo.

La compañía pone a disposición de los clientes que necesiten seguir recibiendo sus semillas de solanáceas o cucurbitáceas tratadas con fungicida su equipo comercial o red de distribución.