14/05/2020
El encuentro ha contado con el patrocinio de Reale Seguros y la colaboración de Syngenta, y en él se han abordado, entre otros temas, el papel que el sector agroalimentario está jugando en la actual crisis provocada por la COVID-19, qué pasará con el presupuesto europeo y la definición de la futura PAC, entendiendo como tal la posible fecha de su entrada en vigor, la figura del agricultor genuino y los eco-esquemas. También ha habido tiempo para debatir sobre comercio internacional, control de fronteras, restricción de materias activas y etiquetado de alimentos.
Ambos contertulios han valorado el importante papel del sector agroalimentario no solo como suministrador de alimentos durante los más de dos meses de confinamiento, sino también en las labores de limpieza y desinfección de pueblos y ciudades. Un sector que, como ha recordado Esther Herranz, no atraviesa por las mejores condiciones, parte de las cuales se están evidenciando con la problemática derivada de la falta de mano de obra en el campo. Por ello, Tomás García Azcárate ha recordado que "cuando desescalemos, no nos olvidemos de los sectores que nos han permitido superar esta crisis".
Entrando de lleno en materia, lo que parece claro es que se aventuran recortes en el próximo presupuesto y que es más que probable que éstos tengan una repercusión directa en la agricultura y la ganadería. "Mi diagnóstico es que el recorte será de entre un 10% y un 15%, en términos nominales ", ha dicho Azcárate, a la vez que Esther Herranz ha reclamado mayor eficiencia a la UE. "El marco financiero plurianual debería ser más generoso".
En cuanto a la posible fecha de entrada en vigor, ambos han apuntado a 2023, aunque el cambio de paradigma total, ha dicho Tomás García Azcárate podría llegar en 2027. Un plazo, que según Esther Herranz, dará más margen de maniobra a los verdes para diseñar una PAC menos agrícola y ganadera.
Mucho interés ha despertado también el bloque dedicado a comercio exterior y control de fronteras, en el que la ex diputada ha reclamado a la UE que instaure un sistema propio para evitar la entrada de plagas y epizootías, así como la homogeneización de criterios en materia de sustancias activas prohibidas y permitidas tanto dentro como fuera de las fronteras comunitarias. Toda vez que Azcárate ha señalado la importancia de ver el alto grado de exigencia comunitario a los productos agroalimentarios como una herramienta de venta diferencial en el mercado y no solo como un factor limitante.
Durante el debate, que ha sido seguido en directo por cerca de 200 personas, también ha habido tiempo hablar de agricultura ecológica, relevo generacional y la figura del agricultor agricultor genuino, entre otros temas.
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